“Tenemos green card!!!! Hacernos residentes para mi mujer y para mi era casi una obsesión. Durante muchos años las circunstancias no jugaban a nuestro favor. Lucía, como empleada del consulado argentino y generadora durante años de la visa que nos permitía trabajar y residir en este país legalmente sin ser residentes, no podía hacer un cambio de estatus. Asi es la ley. Nada personal. Finalmente, cuando ella dejó el consulado nos fuimos cinco años a Argentina y al regresar fue que conocimos a Carmen Arce para que nos ayudase a convertir el sueño en realidad. Lo que parecía sencillo no lo fue. Si bien cumplíamos con los requisitos exigidos por la ley, en primera instancia, nos fue denegada. Es prerrogativa del departamento de Emigraciones la decisión final. Y aquí viene lo bueno. Cuando para nosotros parecía venirse el mundo abajo y alguna lágrima anduvo dando vueltas por nuestras mejillas, apareció esa profesional que excede el marco de su rol. Fue el aliento en lo personal y la actividad constante en lo legal. Apeló, luchó, discutió…ganó!!!. Ganamos. Llevó más tiempo del imaginado pero cuando miramos para atrás todo tiene, como es habitual, otro color. Subir la montaña es duro, cuando estamos en la cima y miramos el camino recorrido no parece tanto. Lo mejor, además de la green card, es el aprendizaje, ni ante emigraciones, ni en la vida misma, hay que tirar la toalla. Nunca. Siempre hay que dar pelea. A Carmen Arce y todo su equipo le estamos super agradecidos. Si ellos hubieran tenido otra actitud ante la negativa, no se…incierto saber lo que hubiera pasado, pero sumado a sus conocimientos ese espíritu de lucha indomable, lo hicieron posible. Gracias. Aquí estamos, para lo que podamos ayudar
”